Querido John

Querida lectora o lector,

Esta película es la adaptación de la novela del mismo título escrita por Nicolas Sparks situada en Carolina del Norte a principios de la década del 2000.
No me extenderé en contar de qué va la trama, puesto que seguro que ya habéis visto una película semejante, por no decir igual. Dos jóvenes rubios, guapos, altos y maravillosos se enamoran un verano en la playa. Ella (Amanda Seyfried) es una chica de buena familia y universitaria, él (Channing Tatum) proviene de una familia con problemas y está alistado en el ejército. ¿Verdad que ya sabéis cómo acaba? Es la película que ya hemos visto millones de veces con caras distintas y paisajes diversos. Esta vez se esfuerzan por incorporar elementos que modernicen las situaciones y las hagan más actuales, más creíbles. Pero el esfuerzo es nulo, pues sólo se trata de una capa demasiado superficial que enseguida se corroe para dar lugar a la verdadera esencia de la película, que no es otra que la archi-conocida historia de un amor imposible, sufrido hasta la máxima potencia por parte de los dos.
Lo dicho, el largometraje está cargado de tópicos, tanto amorosos como patrióticos, pues el protagonista se debate entre el amor a su chica o el amor a la patria.
El director es Lasse Hallstrom, el mismo que dirigió películas como "Las normas de la casa de la sidra", "Atando cabos" o "Siempre a tu lado. Hachiko". Hallstrom es un especialista en dramas y en hacernos llorar a lágrima viva, cosa que, a pesar de lo previsible que resulta Querido John, vuelve a lograr en determinadas escenas. ¿Magia o capacidad? Júzgalo tú misma, sólo puedo decir que gracias al soso de Tatum Channing seguro que no es, pues al pobre sólo le salva su tableta de chocolate.

Always yours,
Att.: Carla Pascual.

P.D.: ¡Sólo entenderéis por qué escribo en formato carta cuando vayáis a ver la película; os acordaréis de mi!
(Carta nº1)